¿Qué es una explosión de polvo?

Las explosiones de polvo ocurren cuando los polvos combustibles se acumulan en el aire y se queman rápidamente, causando una fuerte onda de presión. Son un peligro mortal en una variedad de lugares de trabajo, desde silos de grano hasta fábricas de plásticos. Una explosión de polvo requiere varios factores para estar presentes al mismo tiempo. Éstos incluyen:

  • Un polvo combustible al nivel de concentración correcto
  • Oxígeno
  • Un espacio cerrado
  • Una fuente de ignición

A veces, estos factores se combinan en un gráfico conocido como el “Pentágono de explosión de polvo”. El componente de este gráfico llamado “dispersión” también se conoce como concentración. Si la concentración de polvo es demasiado baja, no hay suficiente para alimentar una explosión. Si la concentración es demasiado alta, no hay suficiente oxígeno para soportar la combustión.

Mientras que algunos polvos combustibles son fáciles de adivinar (polvo de madera y papel, por ejemplo), otros no, como el polvo de aluminio. Los polvos combustibles se vuelven más peligrosos a medida que las partículas se vuelven más finas. Estos polvos tienen una alta proporción de área de superficie a volumen, lo que aumenta su combustibilidad. Cuando estos polvos se combinan con el oxígeno dentro de un rango de concentraciones, es posible una explosión de polvo.

En estas condiciones, todo lo que se necesita para una explosión es una fuente de ignición. Esta fuente puede ser cualquier cosa, desde un cigarrillo hasta una chispa o un cojinete de rueda sobrecalentado. Bajo las condiciones adecuadas, algunos polvos combustibles pueden autoinflamarse como resultado de la estática que se acumula cuando las partículas se frotan unas contra otras. La ignición hace que el polvo se queme rápidamente, un proceso llamado deflagración que crea una ola de alta presión de aire. A veces, esta explosión puede agitar el polvo que se ha asentado en el espacio, creando una nube de polvo nuevo, una fuente de combustible para una enorme explosión secundaria. Una explosión de polvo puede volar las paredes de una instalación y matar o herir a los trabajadores dentro o cerca del espacio.