¿Con qué frecuencia cambian las regulaciones de OSHA?

La respuesta simple es: a menudo suficiente para causar preocupación. Debido a que el proceso de cambiar el código legal es tan complicado, estos cambios no se producen de acuerdo con un cronograma regular, pero cuando lo hacen, pueden causar graves olas en el sector manufacturero.

Cuando OSHA cambia una regulación, establece un calendario para la implementación, explica cómo se aplicará y así sucesivamente. La agencia generalmente otorgará meses, si no años, para que los empleadores se ajusten a la nueva regla. Si bien esto puede sonar generoso, si un cambio en la regulación es lo suficientemente importante, es probable que requiera una acción rápida y seria por parte de un empleador.

Un buen ejemplo de tal cambio se produjo en 2016 cuando OSHA cambió su regulación de la sílice cristalina. La agencia determinó que el límite de exposición permisible (PEL) existente para la sustancia no protegía adecuadamente a los trabajadores y redujo el límite a la mitad. Los fabricantes todavía están luchando para adaptarse al cambio.